Lorenzo Silva tiende un puente entre España y Marruecos

La Fundación Lara publica en septiembre ‘Siete cuidades en África. Historias del Marruecos español’

En el año1956 acababan los protectorados francés y español en el norte de África. Durante 43 años, habíamos dejado nuestra huella en Marruecos; huella que Lorenzo Silva rescata para darnos a conocer este legado en ‘Siete ciudades en África. Historias del Marruecos español’’. Este nuevo título de la colección ‘Ciudades andaluzas en la Historia’ pasea por unas localizaciones que, pese a estar alejadas por un estrecho atribuido a la obra del legendario Hércules, mostraron la prueba definitiva de que es posible unir a dos continentes totalmente diferentes.

Estas historias del Marruecos español sirven también para comprender un poco más una época poco profundizada, pero que tuvo una relevancia importante en el transcurso histórico de nuestro país. El libro será presentado este otoño en la sede de la Fundación Tres Culturas en Sevilla, y el autor visitará luego otras ciudades andaluzas.

Ceuta, Larache, Tetuán, Xauen, Melilla, Nador, Alhucemas. Siete ciudades en África, siete encla­ves singulares en la franja no­roeste del continente, unidos o separados por las fronteras a lo largo de los siglos. Hoy, dos de estas ciudades son españolas y las otras cinco marroquíes, pero en todas ellas hay rastros inten­sos de los oriundos de la penín­sula, que alimentaron su censo y trazaron sus calles. Este libro es un viaje a los años en que se produjo la última reunión de las siete, entre la segunda y la ter­cera década del siglo pasado, con la conquista y pacificación del Protectorado. Es una histo­ria de lucha, pero también de construcción, en la que se cru­zan intentos de comprensión y pasiones recíprocas. Un via­je a espacios que lo son de la memoria común, a un territorio donde las sangres y los afanes de españoles y marroquíes lle­van mezclándose desde siem­pre. Donde acaso venimos es­cribiendo, sin saberlo, capítulos de una historia futura en que las fuerzas se sumen, como un día se sumaron para levantar estas ciudades a la vez europeas y africanas.